Concebida como un teatro donde los muebles son el atrezo, se desplazan de un sitio a otro a través de sus ruedas o de los raíles que el actor Gustavo Salmerón hizo construir en el suelo de microcemento para que todo se pudiese mover con facilidad.
Una caja de cristal de 180 m2 llena de luz natural, donde todo queda al descubierto, ya puedes esconderte que lo ves todo desde cualquier esquina. Destaca por tener su propia personalidad, donde el actor picotea de distintos estilos para crear su propio look, destaca por su armonía y equilibrio; ven a conocer la casa del actor Gustavo Salmerón.
Me recuerda a las casas funcionales de los grandes arquitectos de los años 30, 40 y 50, Le Corbusier, Frank Lloyd Wright, o Johnson. Decoradas con diseños de la Bauhaus y piezas de los diseñadores americanos de los años 50 y 60, Florence Knoll, el matrimonio Eames o Egmont Arens.
Pero con un toque entre castizo y mediterráneo, gracias a su patio con las baldosas de toba, el ladrillo visto, junto a otro toque retro futurista gracias a las piezas industriales recuperadas para crear objetos decorativos y muebles, como los bidones convertidos en tiestos y las escaleras.
La casa está recubierta integramente de microcemento pulido dándole este aire industrial, con un look a lo Mad Max. Un recurso que vimos no hace mucho aplicado en una Singular y hermoso apartamento japonés hecho integramente de cemento, aunque el hogar de Salmerón es mucho más acogedor que este apartamento japonés.
Una casa que refleja la conciencia social del momento, creada a partir de los pedacitos y las sobras de lo que la sociedad capitalista consume, madera de segunda mano, desechos customizados, estufas, paneles, grifos y otros objetos artesanales.
El punto cálido de la decoración lo consigue repartiendo por todo el espacio enormes plantas tropicales; un guiño a las casas funcionales acristaladas argentinas, donde la naturaleza salvaje entra a borbotones en los hogares.
Finalmente añade un toque ecléctico con los distintos toques de color esparcidos por la casa a través de muebles de distintas épocas y estilos decorativos dispares. Encontramos una nevera Smeg rosa, unas sillas Eames salmón y naranja, un taburete rosa, un precioso sofá de color mostaza, una lámpara vintage color limón y turquesa,...
En fin, Gustavo, felicidades por tu nuevo hogar, por tu impecable sentido de la estética, has sabido poner orden al desorden, hacer bello lo feo y unir todos los estilos para hacer uno de nuevo y crear lo que es el look de nuestro tiempo, que no sé ni siquiera si tiene nombre, un estilo que tiene conciencia del pasado, del presente y del futuro.
Imágenes | Gonzalo Machado Más información | Gustavo Salmerón En Decoesfera | Descubre cómo decoran los diseñadores sus propias casas gracias a Studio Boot